La mañana del sábado se tiñó de deporte y entusiasmo en el pabellón de La Victoria, que acogió unas jornadas de floorball con un protagonista indiscutible: el buen ambiente. Más de 60 niños y niñas se dieron cita para disfrutar de este deporte cada vez más en auge, compartiendo risas, aprendizaje y compañerismo en una cita pensada para fomentar la actividad física y los valores del deporte desde edades tempranas.
Desde primera hora, el recinto vibró con la energía de los participantes, que se agruparon por equipos para disputar encuentros amistosos y participar en distintos ejercicios y circuitos técnicos. Bajo la atenta mirada de monitores y entrenadores, los más pequeños demostraron su habilidad con el stick y la pelota, mientras padres y familiares animaban desde la grada en una atmósfera festiva.
Más allá del resultado de los partidos, lo que reinó fue el respeto, la convivencia y el deseo de pasarlo bien. Las sonrisas al final de cada encuentro y los abrazos entre compañeros y rivales fueron la mejor muestra del espíritu que reinó en una jornada que dejó huella en todos los presentes.
Con iniciativas como esta, La Victoria se consolida como un enclave comprometido con el deporte base y con la promoción de actividades saludables e inclusivas. El floorball fue, una vez más, el vehículo perfecto para unir a niños, familias y educadores en torno a los valores que hacen grande al deporte.